Desde el viernes pasado sabemos que prácticamente todo está cerrado debido al COVID-19, una enfermedad que al principio era un bulo, luego pasó a ser un problema asiático para a día de hoy ser una pandemia a nivel mundial.
Está en el civismo de cada uno aportar su granito de arena para que todo esto no siga creciendo y pronto podamos volver a tener esas costumbres tan nuestras, tan españolas, como son el besarnos, abrazarnos o simplemente alternar con nuestros amigos y compañeros al sol en una terraza.
Como os decía parece que todo está parado pero también os comentaba que en cada uno de nosotros tiene que nacer la inquietud de aportar, yo como todos sabéis soy maestro y sin duda lo mejor que me ha pasado estos días ha sido volver a reencontrarme con mis alumnos, poder verlos, escucharlos y sentir que están bien; ver su cara ha sido un regalo, contemplar su expresión de tranquilidad y sus ganas de seguir aprendiendo es el mayor aliciente que todo profesional de la docencia puede tener.
No os engañaré y diré que todo ha sido genial, llevo varios días dándole vueltas a cómo organizar las clases, como estructurar las horas, como hacer que sean entretenidas y a la par constructivas pero sobre todo lo que quiero y más me preocupa es que mis alumnos no pierdan las ganas de vivir y aprender cosas nuevas.
Hoy hemos tenido nuestra primera clase y os puedo asegurar que tengo la certeza que ningún virus que nos meta en casa va a poder con nosotros, vamos a ser más fuertes que él porque sé que todo va a salir bien; mañana tendremos nuestra segunda clase y ya estoy deseando ponerme frente al ordenador y seguir haciendo lo que más me gusta ENSEÑAR CON CARIÑO.
Un abrazo a toda la gente que con su pequeño granito de arena sigue levantando el ánimo y la esperanza de nuestro bonito país.
Neosporteduca 